En el partido revancha de las Semifinales del Reducido de la Primera Nacional, San Martín de San Juan derrotó a Nueva Chicago por 1 a 0 con gol de Ezequiel Montagna (43’PT). El resultado global fue de 2-2, pero como los sanjuaninos tienen ventaja deportiva clasificaron a la final por el segundo ascenso. De como arribaron a la final a nadie le importó porque festejaron como si ya hubieran logrado el ascenso. Quizás los festejos desmedidos se deban al sufrimiento que estuvieron sometidos hasta el pitazo final del partido. El Torito de Mataderos siempre estuvo cerca del empate.
Tal como en el primer partido, San Martín salió con decisión, aunque en esta ocasión superó a Nueva Chicago recién sobre el final de la etapa inicial. Antes le costó demasiado porque la visita estuvo bien parada en sus líneas defensivas. El gol fue un alivio para su juego. Con la ventaja soportó los intentos del Torito de Mataderos. Mantuvo a su rival lejos de su arco y en esa difícil empresa también se olvidó de los tres palos del visitante. No hubo jugadas de riesgo. Pasó el tiempo. La incertidumbre se acrecentó hasta tal punto que todos estaban sufriendo, los de San Juan para que el rival no acertara en sus intentos y los de Nueva Chicago para que alguna pelota, al menos una entre. El final fue desahogo total para los locales. Festejaron con mucha elocuencia, tal vez por tanto sufrimiento.