Estudiantes de Río Cuarto con la victoria de visitante frente a San Telmo se adueñó de la décima posición y salió de la zona de descenso, ese como primer dato, el otro punto a destacar es que le ganó con lo justo a un rival directo para mantener la categoría y afuera de casa los tres puntos se duplican en el ámbito mental porque adosan confianza para llevar a cabo el plan que quiere Iván Delfino en este nuevo ciclo que ya lleva dos victorias.
El único gol llegó desde el punto del penal, aunque pudo haber llegado por otra vía ya que Estudiantes tuvo tres situaciones claras, una de ellas cuando la pelota cruzó todo el frente del arco sin que nadie la empujara al fondo de la red. Una segunda oportunidad sucedió cuando armaron una jugada por derecha y la terminaron con un remate de media distancia para el lucimiento del arquero local; German Yacaruso. Y una tercera cuando el equipo cruzó mitad de cancha en un claro contrataque. Por su parte San Telmo en el primer tiempo apenas tuvo una aproximación sobre el area cordobesa, pero en el segundo tiempo llegó en tres ocasiones con muchísima claridad; en dos Franco Petroli arrojándose sobre su derecha despejó el peligro al córner, y en una sola oportunidad se salvó milagrosamente del empate después de un centro, el balón cruzó el
arco y uno de San Telmo no llegó para empujarlo, cuando Petroli estaba prácticamente vencido.
Dos partidos jugados, dos ganados, sin goles en contra. Esto quiere decir que Estudiantes ha ganado firmeza en defensa porque se agrupa muy bien para proteger su arco; llega a defender hasta con seis jugadores dentro de su área. En los centros y pelotas paradas le cuesta defender con eficiencia, no todos llegan a tomar con justeza las marcas asignadas y el arquero no sale a cortar las pelotas aéreas.
En cuanto a la producción futbolística para desnivelar, está en franco crecimiento; en los dos partidos convirtió los goles desde el punto del penal, Luis Silba frente a Temperley y Mateo Bajamich ante San Telmo. En las dos ocasiones fueron por fallas defensivas del rival; frente a Temperley el defensor comete una falta innecesaria porque se deja anticipar, contra San Telmo un defensor comete mano ante el disparo de un jugador de Estudiantes. Esto quiere decir que el León llega al arco contrario, pero aún falta que lo haga con juego asociado o con sorpresa, o
utilizando el recurso individual, que por ahora no ha mostrado para romper las líneas defensivas del contrario. De local genera más situaciones de gol porque asume el protagonismo, de visitante no tanto. Será cuestión de tiempo porque los dirigidos por Iván Delfino ya mostraron un cambio y eso es positivo. Con confianza podrán asumir el protagonismo tomando la iniciativa para impedir que el rival le genere situaciones y de esa manera evitar que su arquero sea figura. A su vez irán encontrando los caminos para superar a sus rivales y lograr sumar puntos para subir en la tabla en búsqueda de la clasificación al Reducido.