Con goles de Alexis Mac Allister (3’ST), Julián Álvarez (39’ST) y Paulo Dybala (46’ST), Argentina venció a Chile por 3 a 0. La superioridad de Argentina recién se plasmó en el final del partido. Antes contó con innumerables oportunidades; Álvarez definió desviado en una par de ocasiones y De Paul también contó con una posibilidad. Chile tuvo una pelota en el palo cuando estaban igualados. En el segundo tiempo llegó a obligar al Dibu Martínez en una oportunidad.
Argentina es superior a sus rivales por mentalidad, nunca da por perdidas las pelotas. Cuando no la tiene, la presión que ejerce es afixiante, entonces provoca errores en el rival y la recupera rapidamente. La jerarquía del plantel es enorme, da la sensación que es imbatible. Siempre aparece alguién para salvar a un compañero cuando el rival llega a superar la línea media o defensiva. Los jugadores de Argentina se multiplican constantemente. Contra Chile desplegaron un juego de equipo con obvias apariciones de sus figuras que marcaron la diferencia.