La cancha de Douglas Haig de Pergamino fue el escenario del desempate por el descenso del Torneo Federal “A”. Fue testigo de la felicidad incomensurable de Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay porque alcanzó la salvación luego de ganar por 2 a 0 a Unión Súnchales con dos goles de Agustín García (1’ y 14’PT) y de la tristeza infinita de quienes perdieron la categoría.
El Lobo entrerriano pegó primero y en pocos minutos doblegó la diferencia. Esos dos goles en el primer cuarto de hora fueron indescontables para Unión Súnchales. En los últimos encuentros por la Reválida cada vez que abrió el marcador se le hizo imposible a sus rivales poder convertir, asi de local metió tres victorias consecutivas (Juventud Antoniana, Unión Súnchales y El Linqueño) con el arco en cero. Cuando le 
convirtieron, perdió como los casos de los tres últimos partidos de visitante en la Reválida (Sarmiento de Resistencia, Crucero del Norte y Independiente de Chivilcoy). Estos datos demuestran porque Gimnasia arrancó el partido con desición. Golpéo primero al minuto de juego y después aumentó la diferencia siendo muy superior a su rival, que nunca pudo reponerse. Gimnasia hizo su juego, se defendió con mucha gente y con la tranquilidad de la ventaja adquirida no cometió errores. Unión Súnchales no encontró la forma de desequilibrar, no pudo descontar aun cuando tuvo el balón en su poder. Sin espacios le fue imposible preocupar a su contrincante.