El partido correspondiente a la Primera Final de la Región Cuyo del Torneo Regional entre Juventud Alianza de Santa Lucía y Gutiérrez Sport Club de Mendoza fue suspendido en el entretiempo porque la delegación mendocina fue víctima de un ataque de hinchas locales que robaron dos bolsos con indumentaria y agredieron a Oscar Amaya. Ganaba Gutiérrez por 1 a 0 con tanto de Francisco Agost (7’PT). La desición de continuar el partido o sancionar al equipo local depende del Tribunal de Disciplina del Concejo Federal del Fútbol Argentino. Un hecho que debería suceder en ninguna cancha. Se debe castigar a los responsables, que no son unicamente los violentos que ingresaron a los vestuarios sino a los responsables de la seguridad. En este caso existen complices. De eso no caben dudas.
El árbitro cordobés Fernando Rekers indicó la suspensión del encuentro ante el enojo de los hinchas locales. No era para menos después de semejante escandalo. Cerca de siete delincuentes ingresaron al vestuario de Gutiérrez Sport Club , robaron bolsos con indumentaria, golpearon a un jugador, después como si nada se fueron. Minutos más tarde llegó la policía, pero el hecho ya estaba concretado.
El gran perdedor de este triste y lamentable episodio es Juventud Alianza de Santa Lucía. Sus jugadores y cuerpo técnico que vienen trabajando desde hace medio año aproximadamente. La violencia les quitó la ilusión a los hinchas del club sanjuanino y a los protagonistas. Sin lugar a dudas que este caso duele y mucho.