Después de cinco caídas y varias emociones por los tremendos impactos por parte de ambos boxeadores, la pelea entre Tyson Fury y Deontay Wilder terminó en el undécimo asalto cuando el británico mando a la lona al estadounidense. Tyson Fury ganó por nocaut el tercer combate entre ambos y retuvo la Corona Mundial del Concejo Mundial de Boxeo pese a caer en dos ocasiones, en el cuarto round. Wilder cayó en el tercer round, en el décimo y el definitivo en el undécimo round. La pelea tuvo las caídas fruto de la potencia de los golpes de ambos boxeadores, no fue dinámica por los constantes clinch, método que utilizó Tyson Fury para evitar los Jabs de su oponente. Su táctica fue acortar la distancia, hacerle sentir su peso al rival para desgastarlo y a través de swing y uppercat buscar abrir la guardia para lograr el nocaut. Esa forma de pelear dio resultados y a partir del sexto round dominó claramente la pelea. A Deontay Wilder lo mantuvo de pie su enorme corazón y reacciones esporádicas que su rival lograba sentirlas.
En la misma velada boxística Frank Sánchez levantó los cinturones WBO NABO y WBC Continental Américas del peso pesado al derrotar a Efe Ajagba por decisión unánime (97-92, 98-91 y 98-91). Ajagba cayó a la lona en el quinto asalto, siendo la primera vez en su carrera. En otra pelea preliminar Robert Helenius se impuso a Adam Kownacki por TKO en el sexto asalto. Y Jared Anderson ganó por nocaut técnico en el segundo asalto a Vladimir Tereshkin.