Carlos Alfaro Moreno, presidente del Barcelona SC de Guayaquil, disconforme con las convocatorias del seleccionador de Ecuador para el Mundial Sub-20 porque del plantel convocado 6 son de Independiente del Valle, 5 de Liga de Quito, 2 de Emelec, 4 de clubes extranjeros con pasado en Liga y uno con pasado en Independiente del Valle.
En el plantel de la Selección Sub-20 de Ecuador que participará en el Mundial de la categoría a disputarse en la Argentina está conformado por seis jugadores de Independiente del Valle (Christian Loor, también arquero de la sub-17, los volantes Kendry Páez y Alan Minda, los delanteros Justin Cuero, Maelo Rentería y José Klínger), cinco de Liga Deportiva Universitaria de Quito (los defensores Daniel de la Cruz y Yeltzin Enrique, los volantes Madison Minda, Sebastián González y Óscar Zambrano), y dos de Emelec formados en Orense (el arquero Gilmar Napa y del volante Tommy Chamba), y uno de Guayaquil City (el arquero Tony Jiménez) del ámbito local, mientras que los jugadores que llegan de clubes del exterior, son; Stalin Valencia (Pumas Tabasco), Mayki de la Cruz (Stade Reims), Nilson Angulo (Anderlecht) y Denil Castillo (Shakhtar Donetsk) formados en Liga de Quito y Joel Ordóñez (Brujas), debutó en primera división en Independiente del Valle.
El pasado martes, el técnico Miguel Bravo dio la lista del plantel para competir por Ecuador en la Copa del Mundo Sub-20 de Argentina 2023 (del 20 de mayo al 11 de junio próximos) y que debutará contra Estados Unidos, el 20 de mayo, en San Juan. Desde entonces hubo algunas quejas como la del presidente de Barcelona, Carlos Alfaro Moreno porque ninguno de los citados tuvo un pasado o presente en el elenco de Guayaquil que el ex futbolista argentino preside.
Las convocatorias enriquecen a las instituciones cuando un jugador se destaca y luego logra emigrar a los principales mercados del fútbol europeo, eso quiere decir que el club propietario del jugador puede obtener grandes ingresos con una futura venta, pero para llegar a esa realidad deben trabajar demasiado en las divisiones formativas. Si un club no tiene un representante en la Selección de su país algo está pasando, no es por un capricho del técnico de turno. Los buenos jugadores a la edad de 18 o 19 años son visibles porque ya debutaron en Primera División como ocurre en Argentina y a través de la prensa son figuras fijas para el enriquecimiento de un plantel que jugará un Mundial.